El presidente de la Diputación de Málaga y de la empresa pública Turismo y Planificación Costa del Sol, Francisco Salado, ha insistido en que el sector turístico tiene que ser "prioritario para todo" en la toma de decisiones por parte de los gobiernos y ha lamentado que el Ejecutivo central "no se da cuenta de ello y le ha dado la espalda en todos los ámbitos".
En rueda de prensa, Salado ha criticado que se hayan ido adoptando medidas y protocolos diferentes para el sector turístico según los territorios: "En cada uno, una decisión distinta", ha lamentado, al tiempo que ha agregado que el Gobierno central "no se lo ha tomado en serio".
En este sentido, cuestionado por la petición del sector turístico para que sea considerado prioritario en la vacunación, de manera que pueda generarse confianza para aumentar los desplazamientos y, por tanto, la reactivación económica, Salado ha indicado que esto dependerá de los equipos técnicos y científicos.
"Ellos son los que deben decidir quiénes se vacunan antes y dónde hay más peligro de contagio y lo que se decida yo lo aceptaré pero lo que está claro es que el sector turístico tiene que ser prioritario en la toma de decisiones", ha enfatizado.
Sí ha insistido en que espera que en la reunión de líderes europeos prevista este jueves se acuerde la implantación de un pasaporte de vacunación "lo antes posible para facilitar la movilidad en toda Europa, que es esencial".
Por otro lado, sobre el cierre perimetral de 45 municipios de la provincia de Málaga desde este miércoles, 20 de ellos además con cierre de la actividad no esencial por superar los 1.000 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días; Salado ha aludido a la situación "excepcional" actual, "con los contagios prácticamente desbordados y desbocados".
"La movilidad hay que reducirla, el mayor aliado del virus es la movilidad y esa reducción provocará una caída de los contagios", ha sostenido el presidente de la Diputación, también alcalde de Rincón de la Victoria, quien ha admitido que son medidas duras "que no gustan a todos los sectores y que son muy difíciles para todos, no sólo para la hostelería, también para el comercio", entre otros.
A su juicio, frenar al coronavirus "no es sólo tarea de los responsables políticos que tomamos decisiones asesorados por un comité de expertos sino que es tarea de todos". "Necesitamos el apoyo de los ciudadanos", ha reiterado, incidiendo en las medidas de lavado de manos frecuente, distanciamiento social y uso obligatorio de mascarilla para evitar la propagación de los contagios.
En este punto, ha indicado que otras comunidades autónomas españolas están peor que Andalucía, con medidas "mucho más restrictivas". "Podemos llorar con un ojo, es una situación muy difícil, en otros sitios están cerrando a cal y canto todo y aquí, muy inteligentemente y con mucha responsabilidad, se está buscando el equilibrio entre protección de la salud pública y la protección de la actividad económica", ha finalizado.