La Concejalía de Tráfico, Movilidad, Seguridad Ciudadana y Policía Local del Ayuntamiento de Alhaurín de la Torre acaba de adquirir un equipo cinemómetro o radar que contará con dos puntos distintos de control de velocidad en la travesía urbana, concretamente en la avenida de Europa, frente a la marisquería Xeitomar (sentido Churriana), y en la avenida de la Democracia, antes de la fuente de la Biznaga (sentido Alhaurín de la Torre). Según las previsiones del Área, el dispositivo comenzará a funcionar de forma efectiva en un plazo aproximado de 15 días, una vez termine el proceso de conexión eléctrica, el periodo de pruebas y, sobre todo, la certificación oficial del Centro Español de Meteorología (CEM) que acredita la homologación del sistema.
El alcalde, Joaquín Villanova, y el concejal de Tráfico, Pablo Montesinos, quieren dejar claro que no existe afán recaudatorio alguno en esta iniciativa, sino generar un efecto disuasorio entre los conductores para que respeten los límites de velocidad establecidos en este trazado urbano, donde la nueva normativa de Tráfico habilita tramos reducidos a 30 km/h y en algunas zonas intermedias, a 50 km/h.
Y es que la decisión de instalar radares fijos viene avalada por más de 100 peticiones ciudadanas por escrito, recepcionadas en el Registro Municipal de Entrada, y muchas de ellas, con recogida de firmas de las urbanizaciones cercanas a la travesía, en las que se pide al Ayuntamiento que implante medidas para obligar a reducir la velocidad que adquieren algunos vehículos a determinadas horas y en ciertos puntos. Entre ellas, solicitan la instalación de bandas reductoras y badenes.
El equipo adquirido, valorado en unos 35.000 euros, consta de un cinemómetro marca TRUCAM y dos cabinas -que se irán ampliando en número, con nuevos postes, dentro de unos meses en otros puntos del término municipal-, así como el software informático para su uso remoto desde la Jefatura de la Policía Local, siempre bajo la supervisión de un agente.
Dado que el radar irá rotando de forma temporal entre una y otra cabina sin que sea detectable, “el conductor no tendrá más remedio que respetar el límite de velocidad, que es lo que pretendemos. Se trata de crear conciencia de que no se puede correr, no se pueden superar los límites, tal como marca la DGT. Es nuestra obligación velar por la seguridad de todos, conductores y peatones”, subraya Villanova, quien asegura que la medida ha comenzado en dos de los puntos de mayor concentración de accidentes o de mayor riesgo.
El mensaje del regidor es muy evidente: la velocidad constituye una causa directa en un siniestro e influye decisivamente en su gravedad. De acuerdo al régimen sancionador, las multas oscilarán entre los 100 y los 600 euros, en función de si es infracción grave o muy grave, en el caso de superar el límite, así como la retirada de hasta seis puntos del permiso de conducción, en el caso de exceder la velocidad máxima en más de 40 km/h de lo establecido, es decir: a partir de 71 km/h en el tramo de avenida de Europa, y a partir de 91 km/h en el tramo de la avenida de la Democracia.
En los próximos 15 días y de forma aleatoria, el sistema funcionará en periodo de pruebas, pero sin tramitación de los boletines de denuncia. Además, se instalará señalización vertical en las inmediaciones de las cabinas, con el aviso de la presencia de radar fijo, reforzada con cartelería alusiva.