"La Diputación de Cáceres va a trabajar para apoyar, en la medida que sea posible para poder facilitar un servicio importante a muchos ciudadanos de la provincia" como es en este caso el acceso a centros de exámenes de conducción próximos a sus lugares de residencia sin tener que desplazarse a Cáceres capital. Este es el compromiso que asume la Institución Provincial, ha señalado Miguel Ángel Morales, tras la reunión mantenida con alcaldes y alcaldesas de Plasencia, Navalmoral de la Mata, Trujillo y Coria, localidades en las que se encuentran los centros de examen desplazados de la DGT, y en la que también ha participado el Subdelegado de Gobierno, José Antonio García.
Morales ha precisado que se va a hacer un estudio pormenorizado de los costes que suponen la adaptación y digitalización de estas aulas para que puedan prestando el servicio de acuerdo a las novedades introducidas por la DGT para la modernización y mayor accesibilidad de los exámenes teóricos. "Esto supone, por una parte, que los ayuntamientos tienen que aportar el edificio, el mobiliario, y nos están pidiendo a la Diputación que solventemos las necesidades informáticas. Hay que dotar a esas aulas de equipos informáticos con una conexión a internet y esto puede tener un coste elevado", ha explicado el presidente. No obstante, precisa que "tenemos que estudiar el coste" y, a través de la Subdelegación del Gobierno, "se va a solicitar la inclusión de la Institución Provincial en los Convenios que la DGT suscribe con los Ayuntamientos. Vamos a esperar la respuesta de la Dirección General de Tráfico y ver exactamente cuántos equipos informáticos son necesarios, el coste y luego la posibilidad técnica, desde el punto de vista económico y de intervención, si es factible poder incluirnos en ese convenio".

Nuevos Exámenes Téoricos y retos para centros desplazados
Las novedades previstas en los nuevos exámenes teóricos de conducción – que se pondrán en marcha el próximo 2026- y otras ya introducidas en materias de accesibilidad y lectura fácil, suponen un reto para los centros de exámenes desplazados de la DGT como los de Plasencia, Navalmoral, Coria o Trujillo, por los que se ha venido apostando para facilitar a la población el acceso a estas pruebas sin necesidad de realizar grandes desplazamientos.
Para que puedan seguir prestando el servicio de acuerdo a los nuevos requerimientos, estas aulas necesitan ser acondicionadas y digitalizadas. Un procedimiento y compromiso que queda recogido en un Convenio suscrito entre la DGT, que se compromete, entre otros, a cubrir el coste y traslado del personal examinador o apoyo técnico, y que establece que los ayuntamientos asuman los costes de esa digitalización y mantenimiento. Una vez firmado el convenio, el aula debe estar debidamente acondicionada en un plazo de 12 meses. El alcalde de Plasencia, Fernando Pizarro, he explicado que es "francamente difícil" asumir estas inversiones "no solo desde el punto de vista económico, también desde el punto de vista administrativo. Se tratan de inversiones en servicios que no tienen que ver con las competencias municipales, por lo tanto, en las intervenciones municipales suele haber problema para poder dar el visto bueno a inversiones de estas características".
En el resto del país existen ya experiencias de localidades con centros desplazados que han abordado recientemente esta cuestión, con distintas demandas de inversión, como son como Tomelloso y Puertollano en la provincia de Ciudad Real o Calatayud en la de Zaragoza.