Un equipo internacional integrado por investigadores de las universidades de Granada (España) y Antofagasta (Chile) ha conseguido demostrar que el polvo generado por las centrales termoeléctricas perjudica el rendimiento de las plantas solares cercanas. Los responsables de la investigación alertan de pérdidas de hasta el 23% en la fotocorriente debido a la acumulación de partículas industriales que forman costras difíciles de limpiar. Este trabajo, que puede resultar clave para optimizar el mantenimiento de instalaciones solares en zonas industriales, cuenta con la colaboración de diversas instituciones chilenas y europeas.
El estudio, que se ha realizado en una central termoeléctrica del Desierto de Atacama (Chile) y ha sido recientemente publicado en la revista Renewable Energy, ha revelado que los paneles expuestos a emisiones industriales acumulan hasta seis veces más suciedad que en áreas costeras con clima similar. En un periodo de tan sólo cinco meses, los investigadores registraron depósitos de 1,63 mg/cm² de polvo compuesto por yeso sintético, calcita y otros subproductos que cementan la superficie, reduciendo la eficiencia energética y encareciendo el mantenimiento de los paneles fotovoltaicos.

El trabajo de investigación, desarrollado en el marco del proyecto europeo CACTUS (HORIZON-INFRA-2023-DEV-01-06, Ref.: 101132182), analiza el soiling (ensuciamiento) en plantas solares que se encuentran ubicadas cerca de industrias, un fenómeno que agrava la pérdida de energía y eleva los costes de mantenimiento. Dirigido por Aitor Marzo (UGR) y Douglas Olivares (Universidad de Antofagasta), y con participación de centros como ATAMOSTEC, el Solar Energy Research Center (Chile) y la Universidad Loyola de Andalucía, este estudio ha permitido recoger datos en la costa del Atacama, una región con alta radiación solar, pero que registra también una intensa actividad minera y termoeléctrica.
La creciente instalación de plantas solares en recintos industriales —para ahorrar costes y espacio— exige estudiar cómo los contaminantes pueden afectar su rentabilidad. Mediante muestras químicas y mediciones de fotocorriente, los responsables del estudio han podido demostrar que los compuestos industriales forman costras que atraen más suciedad y dificultan la limpieza de los paneles.
Impacto y aplicaciones
Para los investigadores, los resultados de este trabajo subrayan la necesidad de adaptar las estrategias de limpieza y mantenimiento (O&M) en entornos contaminados. Según señala Aitor Marzo, "entender la composición del polvo permite diseñar métodos más eficaces, mejorando la viabilidad económica de estas instalaciones". De hecho, varias empresas fotovoltaicas en Chile ya usan estos hallazgos para optimizar sus operaciones.
La investigación abre una nueva línea para mejorar las herramientas de predicción y el diseño de plantas solares en zonas industriales, un mercado que se encuentra en auge por las políticas de transición energética.