Al grito de 'Somos indesalojables' la Casa Invisible se ha hecho visible este sábado en su ciudad, Málaga. Miles de personas, entre ellas colectivos de la capital, han recorrido las calles del centro en defensa de este centro social y cultural y contra el desalojo del mismo, decretado por el Ayuntamiento.
Ataviados con camisetas negras con el emblema de La Invisible y portando pancartas y banderas, alrededor de 1.600 personas, según la estimación de la Policía Nacional (7.000 según los asistentes), han partido desde calle Nosquera --donde se encuentra el centro en los número 9 y 11-- con un ambiente festivo y pacifista en una marcha llena de color, baile y música que ha reunido a personas de todas las edades, desde familias con niños hasta jubilados.
La actual situación del inmueble, okupado desde hace 15 años y convertido en un espacio para el encuentro cultural de la ciudadanía, es de desalojo inminente, tras su aprobación en junta de gobierno local, el pasado 5 de noviembre. El Ayuntamiento justifica la inmediata ejecución del desalojo y que pase a su posesión en el estado de deterioro en el que se encuentra y la necesidad de acometer la rehabilitación integral del mismo.
Manifestación contra el desalojo de la Casa Invisible
La manifestación ha comenzado desde los balcones de la Casa Invisible con un pleno ficticio del Ayuntamiento recreado por las vecinas, en el que se ha aprobado una "moción urgente por petición popular" para que este centro siga siendo un "espacio de autogestión" donde la cultura, la solidaridad, la amistad y la autoformación se den cita. Desde aquí se ha exigido la necesidad de que haya en Málaga espacios "libres de especulación y privatización".
Las reivindicaciones han bajado a las calles, donde se han oído gritos como 'La Invi no se vende, la Invi se defiende', 'Si nos tocan La Invisible, le paramos la ciudad' o 'La Invi se queda' en una marcha que ha finalizado en el Ayuntamiento, con el objetivo --en tono humorístico-- de "desalojar el gobierno municipal".
A las puertas del Consistorio se ha leído un manifiesto en el que se han dirigido al alcalde, Francisco de la Torre, uno de los protagonistas de los cánticos que se han escuchado: '¿Dónde está Paquito? Paquito está vendiendo la ciudad'.
En el documento le hacen saber que el edificio "es seguro" y que "La Invisible ha cumplido todos y cada uno de los requisitos a los que se comprometió para firmar la cesión de uso del edificio. Es usted el que no ha cumplido, es usted el que engaña a la ciudadanía y le oculta que la situación legal es la de 'cesión en precario'. Es usted el que oculta que eso debería impedirle el desalojo por la fuerza que acaba de anunciar", dice el texto.
"El edificio se ha conservado a pesar de usted y su gobierno, porque esta comunidad lo ama, lo ha cuidado, con horas incontables de esfuerzo y rascándose unos bolsillos que usted ni imagina lo poco que tenían", reza el documento, donde recuerdan que hace cinco años presentaron un proyecto para rehabilitar el edificio pero "lo tiró a la basura, a pesar de que ese proyecto fue elogiado por el personal técnico municipal y por el Ministerio de Cultura".
"¿Sabe usted, Francisco de la Torre, lo que se hace con las instituciones que no cumplen con su cometido? Se desaloja de ellas a su gestor mayor. Ese es usted. Usted sí es desalojable. Pero La Invisible no, porque la vida y la alegría le sobrevivirán. Y lo harán en el mismo edificio que llevamos cuidando desde el año 2007", concluyen.
Entre los colectivos asistentes se encuentran Greenpeace, La Red feminista latinoamericana, La Nave, Las invidanzers, Movimiento Friday for future, Stop Desahucios, La Poderío o Alianza por el Clima.