El consejero de la Presidencia, Administración Pública e Interior y portavoz del Gobierno andaluz, Elías Bendodo (PP-A), ha querido dejar claro este miércoles, en respuesta a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso (PP), que "nadie quiere arruinar la hostelería", pero ha defendido que se "limite" la actividad del sector para frenar la posibilidad de contagios de Covid-19.
En una entrevista en RNE, recogida por Europa Press, el consejero portavoz se ha pronunciado así al ser preguntado por las declaraciones que este martes realizó la presidenta madrileña, quien, sobre la petición de adelantar el toque de queda nocturno que han trasladado en los últimos días al Gobierno una mayoría de comunidades autónomas, señaló que, "para arruinar aún más a la hostelería en España" así como a los comercios, a la iniciativa privada y a tantas familias, con ella que "no cuenten".
Bendodo ha dicho que "respeta aunque no comparta" esa posición de la presidenta de la Comunidad de Madrid, a la que ha definido como "buena amiga", y ha defendido que por parte de la Junta de Andalucía han intentado llevar a cabo durante la pandemia "una cirugía de precisión" y un "equilibrio" entre las medidas para frenar los contagios y la "afección" que éstas tienen en la economía.
Por eso, según ha continuado, la hostelería "no ha cerrado nunca" en Andalucía salvo en el primer estado de alarma de la pandemia, y desde la Junta se han procurado "ayudas" a un sector que "da mucho empleo" en la región y al que la Administración andaluza "cuida", según ha defendido.
Pero Bendodo ha agregado que la situación actual es "muy compleja" y desde la Junta entienden que sí hay que llevar a cabo una "limitación" de la actividad de la hostelería para prevenir contagios entre sus clientes, y al respecto ha recordado que en Andalucía se ha acordado que sus establecimientos tengan que cerrar obligatoriamente a las 18,00 horas.
Ha apostillado que puede "compartir las palabras de Ayuso si las hago generales", en el sentido de que coincide en que "nadie quiere arruinar la hostelería", pero ha insistido en que se debe limitar su actividad en este contexto de "tercera ola agresiva" de la pandemia.