El consejero de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Ramón Fernández-Pacheco, ha exigido una vez más al Gobierno de España que "haga todo lo que esté en su mano" para bloquear la Política Agraria Común (PAC) que ha propuesto la Comisión Europea para el período 2028-2034 porque "que no es la PAC que necesitamos". "Que ejerza su potestad de decir no al nuevo marco financiero plurianual en el Consejo Europeo", ha reclamado. El representante de la Junta ha insistido en esta reclamación que, como ha recordado, lleva realizando desde el pasado mes de julio tras reunirse para abordar esta cuestión con las organizaciones profesionales agrarias (Asaja, COAG y UPA) y Cooperativas Agro-alimentarias en el marco de la Mesa de Interlocución Agraria de la región. "Un encuentro que sirvió para reafirmar la posición unánime de Andalucía frente a la nueva PAC y que ayer, en otra reunión más, se volvió a ratificar", ha explicado.
Ramón Fernández-Pacheco ha destacado que el momento actual es decisivo para que el Gobierno de España, encargado de representar al país como Estado Miembro de la Unión Europea. Al respecto, ha subrayado que el Estado "puede bloquear este recorte y forzar un cambio de la PAC con su voto en contra en el Consejo Europeo a un nuevo marco financiero plurianual que resultaría lesivo".
Esta tarde, el consejero ha comparecido en el Parlamento de Andalucía para informar sobre el posible impacto que puede tener la reducción del presupuesto de la PAC post 2027 en el sector agrario andaluz y ha hecho hincapié en que "sin una PAC tal y como la conocemos no hay agricultura ni ganadería; ni en Andalucía, ni en España, ni en Europa". Al hilo de estas declaraciones, ha explicado que esta política europea "ha contribuido decisivamente a configurar el actual sistema agroalimentario andaluz, pilar económico sobre el que se asienta un sector esencial que genera empleo y favorece el equilibrio territorial de Andalucía".

La propuesta de la Comisión Europea conlleva, como ha lamentado Fernández-Pacheco, "un hachazo inaceptable del presupuesto dedicado al sector primario". Se trataría, en concreto, de un recorte del 22% del presupuesto destinado a la PAC en el marco actual. Esta rebaja podría hacer perder alrededor de 2.000 millones de euros en ayudas a los agricultores y ganaderos de Andalucía según las primeras estimaciones de la Junta. Esta reducción de las subvenciones tendría un grave reflejo en la economía de los productores de la región, ya que actualmente el 60% de los agricultores y el 70% de los ganaderos andaluces reciben estas subvenciones. Por esta razón, el propio presidente de la Junta ha mostrado su rechazo a una nueva PAC que, como ha apuntado el consejero, "no es aceptable para Andalucía".
Además del recorte de los fondos, la propuesta de la Comisión Europea recoge otros cambios que tampoco comparte el Gobierno andaluz y a los que también se ha referido en su intervención Ramón Fernández-Pacheco. "Este Gobierno no solo rechaza el presupuesto en sí, sino que también se opone frontalmente al fondo único y al cambio de estructura que el nuevo marco financiero europeo establece para la PAC", ha afirmado el consejero.
Posición andaluza
Frente a la propuesta europea, el Ejecutivo andaluz apuesta, como ha remarcado Fernández-Pacheco en el Parlamento, por "una PAC fuerte con presupuesto independiente y actualizado según la inflación que blinde las ayudas a los agricultores y ganaderos y mantenga inversiones clave para el sector agroalimentario y el desarrollo rural". Desde Andalucía, se defiende la necesidad de que se mantengan los instrumentos de programación específicos dada su importancia para reflejar las particularidades del sector agrario, muy condicionado por cuestiones geoestratégicas, el clima, las características propias de cada producto y las peculiaridades de cada territorio.
Asimismo, entre otras críticas a la oferta de la Comisión, el Gobierno andaluz rechaza que se elimine el presupuesto específico que se viene estableciendo a nivel europeo para los programas operativos de frutas y hortalizas; que desaparezcan de la PAC intervenciones concretas como la modernización de industrias o la mejora de regadíos; y que se obvien los mecanismos de gestión de mercados y crisis que tanta falta hacen al sector. La Junta tampoco comparte que los sectores apícola y del vino dejen de tener un presupuesto garantizado en todo los territorios para que, a partir de 2028, cada país decida los fondos que se destinan a estos productores.