El alcalde de Cádiz, Bruno García, ha inaugurado en la mañana de este sábado la exposición 'Rituales funerarios en Gadir y Yacimiento Arqueológico Casa del Obispo (Monumento funerario fenicio y Santuario Salutífero romano)', que ha servido para su reapertura 11 años después de uno de los yacimientos romanos más importantes que hay en España.
Bruno García ha estado acompañado de la teniente de alcalde delegada de Cultura y coordinadora del Cádiz Romana, Maite González, el teniente de alcalde de Mantenimiento Urbano, José Carlos Teruel, el arqueólogo municipal José María Gener y el ilustrador Fabio Castro.
Una vez que se ha producido la reapertura de este espacio, al que se puede llegar también desde el contiguo Entrecatedrales, muchísimas personas han visitado el yacimiento y la exposición.
Bruno García ha resaltado ante los medios que el programa que ha puesto en marcha el actual equipo de Gobierno, el 'Orgullosos de nuestra historia', "es volver a nuestro pasado y traerlo al presente para que nos ayude en nuestro futuro. Nos ayuda a reforzar nuestra identidad como ciudad patrimonial y relacionada con la cultura".
De este modo, cree que este programa aporta conocimiento científico, también numerosos eventos y actividades para la ciudadanía "y la tercera pata es la recuperación del patrimonio".
El alcalde ha advertido de que "esto de hoy no es nuevo. Cuando llegamos al equipo de Gobierno, encontramos cinco espacios que llevaban años cerrados. En dos años hemos abierto el castillo de San Sebastián, el Baluarte del Orejón, el Torreón y Paseo Superior de las Puertas de Tierra, Entrecatedrales y ahora la Casa del Obispo".

Así, ha recordado que "cuando uno puede abrir cinco espacios es porque había cinco espacios cerrados. Tenemos un compromiso inequívoco y rotundo que donde haya un espacio sin abrir y tengamos la capacidad, vamos a poner todo lo posible para recuperarlo y eso se hace con voluntad y presupuesto".
Por su parte, Maite González, además de agradecer a todas las personas que han hecho posible la apertura de la Casa del Obispo y a la Delegación de Mantenimiento Urbano, ha asegurado que "nos pusimos como reto la apertura de este yacimiento y hoy lo hemos conseguido".
La teniente de alcalde Cultura ha añadido que ha quedado una parte del yacimiento, entre un 15 y un 20% de todo el espacio no se ha abierto en la actualidad a la espera de que en los próximos meses se pueda hacer una intervención".
Precisamente, José María Gener, abundaba en este aspecto y dijo que "no se ha abierto porque estén deteriorados los restos arqueológicos, sino porque es un poco mas delicado que el resto y necesita un proyecto más reflexionado y con más tranquilidad".
Gener ha incidido en que "ahora el yacimiento tiene un recorrido lógico, es decir, pasamos de la época fenicia, que es el momento en el que se hace ese monumento funerario que hace que esta zona se sacralice y sea religiosa para toda la vida porque estamos entre las dos catedrales". De este modo, en lo que se refiere al yacimiento de la Casa del Obispo "lo que hemos interpretado es que aquí había una zona sagrada vinculada a un santuario saltífero".
Esta reapertura viene acompañada con una serie de reconstrucciones en 3D donde se puede ver lo importante que era el urbanismo en esta zona en la Gades romana.
Por último, Fabio Castro, el autor de las ilustraciones artísticas de la exposición, ha afirmado que "la historia la escribimos día a día. Todos tenemos el derecho y la necesidad de ser cuidados pero también de cuidar. La arqueología tiene en común con la ilustración que es alumbrar lo invisible".
La Casa del Obispo
La reapertura del yacimiento arqueológico de la Casa del Obispo conlleva, por primera vez, la unificación dentro de un recorrido arqueológico entre el Espacio Entre Catedrales y los retos que conservados en el interior de la Casa del Obispo.
El visitante podrá realizar una visita que va evolucionando temporalmente desde la construcción del momento funerario fenicio púnico hasta realización del santuario salutífero de época romana, que estuvo en funcionamiento hasta finales del siglo tercero después de Cristo.
Para su explicación se ha realizado diferentes audiovisuales que explican la evolución arquitectónica de un espacio que ha sido sagrado desde época fenicia hasta la actualidad, de ahí que estamos entre las dos Catedrales de la ciudad.
Además el yacimiento se enriquece con una exposición artística del Ilustrados Fabio Castro sobre los santuarios salutíferos romanos, al igual que la que realizó el año pasado en el espacio Entre Catedrales sobre los rituales funerarios fenicios
La exposición
La exposición Ilustraciones sobre salud y medicina romana para el templo salutífero, Asklepeion de Gades, del ilustrador gaditano Fabio Castro Jiménez, reúne cinco obras de gran formato inspiradas en la medicina romana y en los hallazgos arqueológicos de la Casa del Obispo de Cádiz.
El artista combina documentación arqueológica, bajo la tutela del arqueólogo municipal José María Gener, con un lenguaje contemporáneo cargado de simbolismo. Nos propone un viaje visual donde la serpiente, símbolo de renovación y de la medicina, aparece como leitmotiv en una colección que explora la relación entre el mito, la historia y las prácticas de sanación romanas.
Las cinco ilustraciones recorren distintos aspectos del mundo salutífero romano: la llegada de Apolonio de Tiana a Gades y su especial atención al enigma de las mareas, acompañado metafóricamente por Apolo y por su discípulos, entre los que también está el filósofo neopitagórico Moderato de Gades; un muestrario circular de plantas medicinales usadas en la antigüedad; un despliegue de instrumentos quirúrgicos sobre epígrafes de médicos gaditanos; el ritual onírico de la incubatio presidido por Esculapio; y la figura de Higía, diosa de la salud, vinculada al agua como elemento divino y sanador.
Un amplio abanico de elementos arqueológicos, muchos de ellos conservados en el Museo Arqueológico de Cádiz y en el propio Asklepeion, se integra en todas las obras, trazadas con un estilo gráfico con cierta inspiración del mundo del cómic y la animación. Recursos geométricos, un aire onírico y el personal discurso cromático del autor dotan a la serie de un carácter mágico y evocador. La luz, presente en cada escena como recurso narrativo y espiritual, se convierte en metáfora de conocimiento, evocando la tarea común de médicos, arqueólogos y artistas: iluminar lo invisible.