Agentes de la Policía Nacional de Motril han llevado a cabo la Operación Miranda en la que han desmantelado una plantación de marihuana oculta en un zulo excavado bajo un cortijo situado en un paraje remoto del término municipal de Salobreña, donde han incautado 670 plantas de dicha sustancia. Además, han detenido a dos de los presuntos responsables del cultivo, un varón de 40 años de nacionalidad española con antecedentes policiales y su pareja de 33 de nacionalidad británica, sin antecedentes policiales, a los que también se considera autores de defraudar el fluido eléctrico. Los agentes no descartan nuevas detenciones relacionadas con la investigación.
Las pesquisas se iniciaron un par de meses antes, cuando agentes del Grupo de Estupefacientes de la comisaría de Motril captaron cierta información sobre el cultivo de marihuana en una vivienda rústica situada en un paraje de Salobreña. El trabajo de los policías vino a confirmar la veracidad de la información y a localizar la supuesta plantación en una finca rústica que cuenta con un inmueble en la que se evidenció la existencia de elementos característicos de las instalaciones dedicadas al cultivo a gran escala de cannabis. En las siguientes semanas se desarrolló la investigación donde se recopiló el resto de la información necesaria para su explotación, incluida la identificación de los presuntos responsables.
Cultivo de marihuana en un zulo excavado bajo el cortijo
Finalmente, se llevó a cabo el registro de la edificación y la primera tarea consistió en localizar la ubicación exacta del cultivo, observando la existencia de una rampa que daba acceso a la instalación subterránea, un zulo excavado bajo la estructura del inmueble y que se extendía a lo largo y ancho del mismo. Una vez flanqueada la puerta de acceso al habitáculo, se comprobó que el mismo se había acondicionado para el cultivo y elaboración de cannabis sativa y contaba con sistemas automatizados de iluminación, riego y aireación.
En el interior del zulo, los agentes intervinieron las 670 plantas de marihuana en avanzado estado de floración y desmantelaron la estructura con la que contaba para favorecer su crecimiento y floración. Asimismo, comprobaron que el inmueble carecía tanto de contrato de suministro eléctrico como, siquiera, de contador, ya que se abastecía mediante una acometida ilegal a la red pública.
La detención de uno de los presuntos responsables del cultivo se desarrolló paralelamente al registro, con ocasión de un control policial establecido previamente por agentes de la brigada de seguridad ciudadana de la comisaría de Motril, en una vía de acceso a la finca, tras comprobar su presunta relación con la plantación. A continuación, los investigadores localizaron a la segunda detenida y pareja sentimental del primero en Salobreña.