La dieta formada por alimentos vegetales integrales es buena contra la incapacidad de lograr una erección firme para tener una relación sexual satisfactoria, problema conocido como disfunción eréctil. Así lo apunta una investigación del área de Medicina de la UGR.
Concretamente, la revisión científica se centra en el impacto positivo de una alimentación vegetal (vegana) integral frente a la disfunción eréctil arteriogénica, que es el tipo más frecuente en hombres mayores de 45 años y se considera, a la vez, un factor predictor de eventos cardiovasculares.
"El elemento común entre la disfunción eréctil y las enfermedades cardiovasculares arterioscleróticas es la disfunción endotelial, que constituye la primera alteración en el desarrollo de las placas de ateroma. Esto ocasiona rigidez arterial e inadecuada dilatación ante la llegada de un mayor flujo de sangre", detalla Mariana del Carmen Fernández-Fígares Jiménez, investigadora, dietista-nutricionista y estudiante de Medicina en la UGR.
¿Cuáles son los alimentos que ayudan contra dicha patología? La investigadora los describe: "Frutas, verduras, legumbres, cereales integrales, frutos secos y semillas a las que no se les ha retirado ninguna de sus partes comestibles ni se les ha añadido ningún ingrediente no integral".

Investigadora Mariana del Carmen Fernández Fígares Jiménez
Este tipo de dieta es mucho más beneficiosa frente a la disfunción eréctil que aquella con alimentos de origen animal. Ensayos clínicos controlados han demostrado una mejora de los parámetros de riesgo cardiovascular y de reducción de la aterosclerosis, favoreciendo así la adecuada función endotelial arterial.
Aunque esta investigación se centra en el impacto sobre la disfunción eréctil, los estudios ya han demostrado que la dieta vegetal integral es buena para combatir la diabetes, enfermedades cardiovasculares, cáncer, enfermedad renal crónica y demencia.
Además, la mortalidad disminuye a medida que se incrementa la proporción de alimentos vegetales integrales en la dieta y se reduce la de alimentos de origen animal y la de alimentos vegetales refinados o no integrales.
"Por estos motivos, una dieta vegetal integral debería considerarse como una potencial herramienta en la prevención y mejora de la disfunción eréctil y de enfermedades crónicas", concluye la investigadora Mariana del Carmen Fernández-Fígares.