Guía de San Pedro Alcántara
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El Ayuntamiento de Bilbao inicia las obras de construcción de los dos depósitos de inundación previstos para la isla de Zorrotzaurre.
Infraestructuras que van a ser ubicadas en dos parcelas de propiedad municipal en Ribera de Deusto, próximos a los edificios de Artiach y Papelera, respectivamente.
Cuentan con un presupuesto de 5.671.801,66 euros (sin IVA) un plazo de ejecución de 20 meses.
Su misión principal será la de evitar inundaciones de calzada y afecciones a la red de pluviales en episodios de mareas altas –en las que la red de pluviales queda por debajo de la cota de la Ría.
Para ello, ambas infraestructuras deben tener un volumen de almacenamiento suficiente que les permita acumular el agua en los episodios en los que la marea no permite el alivio por gravedad, y su posterior vaciado, cuando desciende el nivel en la Ría.
En concreto se estima un volumen útil de 1.031,70 metros cúbicos para el Depósito 1 y 1.190,25 metros cúbicos para el Depósito 2. Esta solución, permitirá minimizar los alivios por bombeo.
Además, con el objetivo de mejorar la calidad de las aguas vertidas a la Ría, a la entrada de los colectores de pluviales a cada depósito se va a colocar un desarenador y un separador de grasas.
Excavación y estructura
Ambos equipamientos deben cumplir con los condicionantes y las cotas impuestas por la urbanización proyectada.
Analizando esto y contrastando también los episodios de llenado y vaciado de los depósitos con distintos escenarios de tormenta (duración, intensidad....) así como diferentes situaciones de marea –y detectando, por tanto, los casos en los que se haría necesaria la entrada en funcionamiento de los equipos de bombeo–, se ha optado por depósitos de mayor superficie y menor profundidad. Lo cual exige, para su ejecución, la excavación hasta cota aproximada de -2 metros.
Hay que destacar que el terreno en el que se van a ejecutar está compuesto en distintas capas por rellenos artificiales, suelos aluviales-estuarianos (limos en su mayoría), gravas con limos y arenas y finalmente roca. Por ello se va a abordar una excavación con entibaciones impermeables, que además aseguren la estabilidad del fondo.
Como elementos de contención se han elegido pantallas de hormigón empotradas en roca. Esto posibilitará, además, la cimentación para la cubierta de la cancha deportiva proyectada sobre el Depósito 1.
La cimentación de los depósitos se va a solventar con losa de hormigón y la estructura se completará con un muro perimetral de 30 centímetros de hormigón armado y pilares del mismo material de 40x40 centímetros.
Conducciones de vertido
Por cada uno de los dos depósitos, se prevén tres conducciones que verterán a la Ría: la conducción de vertido por gravedad, la conducción del bombeo y la conducción desde la arqueta de los colectores de pluviales.
En este sentido, las conducciones de vertido a la Ría por gravedad tendrán profundidades relevantes, requiriendo excavaciones bajo la rasante actual de más de 4 metros en algún caso; y se llevarán a cabo mediante zanjas a cielo abierto con un sistema de entibación con tablestacas para la contención del terreno.
Así, y con el fin de dar continuidad a la circulación peatonal y rodada por la calle Ribera de Deusto, durante la ejecución de estas conducciones, será preciso plantear desviaciones de tráfico. Éstas se resolverán por encima de los propios depósitos proyectados, una vez ejecutado el relleno de tierras hasta cota de urbanización actual; y el tráfico se regulará con semáforos provisionales –ya que solo será posible la circulación de vehículo en un sentido–.
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