Un agente de la Policía Nacional, destinado en la Jefatura Superior de Policía de Aragón, rescató a un joven de 18 años que se encontraba en peligro de ahogamiento mientras nadaba en la Playa del Capri, en el municipio de San Carlos de la Rápita (Tarragona).
El agente, que se encontraba fuera de servicio y practicando natación en la zona, observó cómo un joven se alejaba a nado hacia las boyas que delimitan la zona de baño, avanzando con dificultad y sin experiencia aparente. Consciente de que la zona estaba afectada por corrientes marinas desfavorables y tras presenciar cómo el joven comenzaba a agitarse, bracear sin rumbo y gritar insistentemente "¡Help!", decidió intervenir.

El joven presentaba síntomas evidentes de agotamiento. El agente logró tranquilizarlo y estabilizarlo en el agua, manteniéndolo a flote. A escasos metros de la orilla, una mujer que se encontraba practicando paddle surf, ofreció su tabla al policía, lo que facilitó completar el rescate con seguridad.
Ya en la orilla, el joven fue asistido por una médica que también se encontraba en la playa, no siendo necesario su traslado a un centro sanitario. Sus padres, muy agradecidos, destacaron la rápida y valiente actuación del agente, que sin duda evitó una tragedia.