El Servicio de Cardiología del Hospital Universitario de Cabueñes ha consolidado con éxito una técnica para implantar válvulas aórticas percutánea (TAVI), un procedimiento mínimamente invasivo que evita la cirugía a corazón abierto. Este equipo de profesionales ha colocado desde febrero hasta ahora medio centenar de dispositivos mediante este procedimiento, más seguro y eficaz. La técnica consiste en introducir una nueva válvula a través de un catéter, generalmente por la arteria femoral, sin abrir el esternón.
Gracias a los avances tecnológicos, al trabajo coordinado de un equipo multidisciplinar especializado en patologías valvulares y al compromiso con la medicina basada en la evidencia, la TAVI se ha convertido en una opción de tratamiento de vanguardia. Su evolución ha permitido que el procedimiento se realice en el laboratorio de hemodinámica, sin anestesia general, lo que minimiza complicaciones y acorta la estancia hospitalaria. En algunos casos, incluso es posible recibir el alta médica el mismo día de la intervención.

Antes de la incorporación de esta técnica era preciso practicar cirugía convencional a corazón abierto en quirófanos híbridos, con anestesia general y un proceso de recuperación más prolongado.
La patología valvular más común es la estenosis aórtica, que consiste en el estrechamiento de la válvula aórtica, lo que dificulta el flujo sanguíneo desde el corazón hacia la aorta y el resto del cuerpo. Por ello, las guías clínicas recomiendan la TAVI especialmente para personas de edad avanzada o con alto riesgo quirúrgico.