Una mujer ha sido detenida y condenada a cuatro meses de prisión por agredir desnuda a dos agentes de la Guardia Civil en Roquetas de Mar (Almería) a los que propinó varias patadas cuando intentaban calmarla en la vía pública y durante su traslado a dependencias policiales, según la sentencia firme dictada este lunes por el Juzgado de Instrucción número 1 del municipio.
La resolución, a la que ha tenido acceso EFE, considera probado que la acusada, K. W., de nacionalidad polaca y sin antecedentes penales, estaba sobre las 22:10 horas del 9 de noviembre en la puerta de un restaurante de Roquetas, "gritando y realizando aspavientos".
Personados en el lugar los agentes, la mujer no cesó de insultarlos y, "con evidente desprecio al principio de autoridad que representaban", les dio patadas, impactando una de ellas en un guardia civil y durante el traslado en coche oficial propinó tres patadas en el costado derecho a otro guardia, ofreciendo "resistencia activa" en todo momento, según el fallo.
Ambos agentes sufrieron lesiones leves: uno, un hematoma en el pómulo derecho que requirió un día de curación, y el otro, un hematoma intercostal con tres días de curación, sin impedimento para sus funciones.

El juzgado condena a K. W. por un delito de atentado contra agente de la autoridad y dos delitos leves de lesione y le impone cuatro meses de prisión -con inhabilitación especial para el sufragio pasivo durante ese tiempo- y dos multas de veinte días a razón de cuatro euros diarios. También deberá indemnizar a los agentes con 50 y 150 euros, respectivamente.
La juez acuerda la suspensión de la pena de prisión durante dos años, condicionada a que la condenada no vuelva a delinquir y satisfaga las cantidades fijadas. El fallo es firme al haber renunciado las partes a presentar recurso.
Tras conocerse la sentencia, la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) ha denunciado la "escasa protección jurídica y material" de los agentes ante este tipo de agresiones.
El secretario general de la AUGC en Almería, Víctor Vega Romero, ha afirmado que "sale muy barato agredir a las fuerzas y cuerpos de seguridad", en referencia a las indemnizaciones de 150 y 50 euros reconocidas a los dos agentes.
Vega ha explicado en declaraciones remitidas a los medios que los compañeros no tenían coche con mampara, lo que dificultó el traslado y aumentó el riesgo de agresión, y que la detenida "estaba fuera de sí por la posible toma de sustancias y además desnuda", lo que complicó su reducción.
"Hace falta más medios, hace falta más personal", ha reclamado, al tiempo que ha advertido de que el Poniente almeriense "se está poniendo muy crudo" y que las agresiones "están subiendo exponencialmente".
Ha insistido en que el reconocimiento de la Guardia Civil como profesión de riesgo sigue siendo "una asignatura pendiente", y ha pedido refuerzos para el puesto de Roquetas, donde -ha dicho- los efectivos de Vícar tienen que desplazarse continuamente "porque en Roquetas no hay personal suficiente", lo que agrava la carga de trabajo y el deterioro de los vehículos oficiales.





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