IU pone en marcha un Plan de Igualdad para que llegue “a todos los niveles de la organización” y que “nuestras mujeres y hombres mejoren su participación y su experiencia militante”

Izquierda Unida pone en marcha un Plan de Igualdad con el “objetivo general” de “lograr la igualdad efectiva entre mujeres y hombres en todos los niveles de la organización”, según marca el propio texto y, como destaca Clara Alonso, responsable de Feminismo de la dirección federal y que ha estado al frente del trabajo, “que tanto las mujeres como los hombres de IU mejoren su participación y su experiencia militante”.

El Plan de Igualdad tendrá una vigencia de cuatro años (2022-2025) y fue aprobado definitivamente por amplísima mayoría y sin ningún voto en contra en la Coordinadora Federal celebrada el pasado sábado, día 2. Con las incorporaciones que se incluirán fruto del último y fructífero debate suscitado se culminan meses de consultas y análisis internos que han involucrado tanto a los órganos de dirección como al conjunto de las federaciones de IU.

Toda su elaboración “forma parte de los planes de trabajo que nos hemos marcado y también recoge los objetivos señalados por la Red de Feministas, que hemos tenido muy en cuenta para el resultado final”, afirma Alonso.

Izquierda Unida se define en sus Estatutos como un Movimiento Político y Social (MPS) anticapitalista, que pretende la transformación del actual orden económico y social en un nuevo país socialista, feminista, plural, federal, republicano y ecologista fundamentado en los principios democráticos de justicia, igualdad, solidaridad, libertad y respeto por la naturaleza, los animales, la ecología y las diferencias personales, y defender la paz como principio para la convivencia entre los pueblos.

Del mismo modo, como recuerda Clara Alonso y se recoge en el texto, IU fija en sus Estatutos la necesidad de impulsar la afiliación de mujeres y su participación en todas las actividades de nuestra organización, “removiendo los obstáculos que la dificulten, de tal forma que su presencia sea la consecuencia natural de su implicación en todos los procesos”.

Alonso expone también que “el conjunto de la afiliación de Izquierda Unida, cargos públicos y dirigentes hemos asumido e integrado el discurso feminista en nuestra práctica cotidiana. Pero somos conscientes de que todo es susceptible de mejorar y de ahí que nos impliquemos en impulsar todos los cambios precisos hasta alcanzar una cultura política libre de machismo, tanto dentro como fuera de la organización”.

Destaca que estamos ante “una reivindicación histórica de las feministas de Izquierda Unida. Nos sitúa como una organización pionera en la implantación de este tipo de planes que, siguiendo el modelo de los planes de carácter laboral, lo traducen al ámbito de la participación política”.

Al “objetivo general” de lograr la igualdad efectiva entre mujeres y hombres le acompañan otros 16 objetivos específicos y 46 medidas, “que son el resultado del análisis y debate de un diagnóstico que nos ha permitido tener una fotografía clara de nuestra organización”, se señala en el texto.

“Queremos que este Plan de Igualdad -incide Clara Alonso- sea una herramienta eficaz para el conjunto de la organización y que los objetivos marcados se hagan realidad en todos los espacios de participación política. Ser una organización más feminista es fundamental para ser una organización mejor”.