Los datos de empleo correspondientes a agosto reflejan un repunte estacional habitual en este mes, aunque se mantiene la tendencia interanual positiva del mercado laboral en Euskadi.
En concreto, se ha registrado un aumento de 4.178 personas desempleadas respecto a julio (+3,98%), lo que suma un total de 109.169 demandantes de empleo registrados en Lanbide.
En términos interanuales, el paro registrado se ha reducido en 2.194 personas, lo que supone un descenso del 1,97% respecto al mismo periodo del año anterior. La disminución ha sido especialmente significativa entre las mujeres, con una bajada del 2,05%, lo que evidencia un avance en la reducción de las brechas de género en el desempleo.
Otro aspecto destacable es la mejora en el paro de larga duración, que en comparación con agosto de 2024 ha descendido en 1.165 personas (-2,18%). Este dato cobra especial relevancia, ya que muestra una recuperación paulatina de colectivos tradicionalmente más vulnerables en el acceso al empleo y la efectividad de las medidas puestas en marcha por el Departamento de Economía, Trabajo y Empleo para favorecer su contratación. En la evolución mensual, en agosto se ha incrementado el número de personas paradas de corta duración (7,93%), mientras que el paro de larga duración ha permanecido estable.
Por actividad, en términos mensuales, el mayor descenso del número de personas desempleadas se ha registrado entre aquellas que no tenían un empleo anterior (-403), mientras que el mayor incremento se ha dado en Educación (+2.142), una circunstancia puntual y habitual durante las vacaciones de verano.

Por otro lado, el actual contexto internacional, marcado por la incertidumbre, no ayuda a la recuperación de ciertos sectores industriales, en particular la metalurgia, que ha registrado un repunte de paro interanual (+13,6%). Por ello, este departamento estará pendiente de la evolución del ámbito industrial.
La hostelería, por su parte, mantiene un cambio de tendencia: el incremento de la contratación en este sector se adelantó a junio y en agosto se ha detectado un aumento del número de personas fijas discontinuas en periodo de inactividad (658). Pese a ello, el sector conserva un peso relevante en contratación indefinida (37,1%).
Contratos y Seguridad Social
Durante agosto se firmaron 45.913 contratos, un 4,3% menos que hace un año. De ellos, 9.539 fueron indefinidos (20,8%), lo que consolida una cifra por encima del 20% que se mantiene estable desde la reforma laboral.
Destaca el aumento de los contratos indefinidos a tiempo parcial, que suben en parte por el mayor peso de las mujeres en este tipo de contratación: el 46% de las trabajadoras accedió a contratos parciales, mientras que entre los hombres es del 26,6%. El colectivo femenino mantiene un papel central en la evolución del empleo en Euskadi, sobre todo en los tramos de edad superiores a 30 años, que muestran saldos positivos interanuales.
Respecto a la afiliación a la Seguridad Social, la cifra en Euskadi se sitúa en 1.006.795 cotizantes, 16.505 personas menos que las registradas en julio. En términos interanuales, la afiliación en la Comunidad Autónoma Vasca se ha incrementado en 9.724 personas trabajadoras respecto a agosto de 2024, un 9,98% más.
En conclusión, desde el Departamento de Economía, Trabajo y Empleo valoramos estos datos con prudencia y nos gustaría subrayar la importancia de analizar la evolución con perspectiva. Aunque agosto refleja un repunte mensual de paro, la mejora interanual y la calidad creciente de la contratación indefinida muestran que el mercado laboral vasco sigue avanzando.
El Departamento de Economía, Trabajo y Empleo continuará impulsando medidas para mejorar la calidad del empleo y reforzar la protección de las personas trabajadoras, con la Ley Vasca de Empleo y la Estrategia Vasca de Empleo 2030 como marcos de referencia. Seguirán siendo nuestra hoja de ruta para transformar el mercado laboral desde una visión inclusiva, sostenible e innovadora. Ambas iniciativas refuerzan nuestro compromiso con una Euskadi que genera empleo de calidad, reduce las desigualdades y pone a las personas en el centro de las políticas públicas.