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“Aquel 28 de febrero de 1980 los andaluces dijimos masivamente en las urnas sí a nuestra autonomía en el marco de la Constitución del 78. Desde entonces es, sobre todo, un día de emoción y orgullo. La emoción al escuchar nuestro himno y ver la bandera blanca y verde colgada de los balcones. El orgullo de reivindicar nuestras raíces, nuestra cultura y nuestra identidad”. La presidenta del Parlamento de Andalucía, Marta Bosquet, ha recordado con estas palabras, el 28 de febrero de hace hoy 42 años en el pleno institucional por el Día de Andalucía que se ha celebrado en la fachada principal de la Cámara autonómica. Bosquet ha iniciado su discurso condenando la “agresión injustificable” de Rusia a Ucrania que “atenta no solo contra la integridad territorial de un país soberano, sino contra los valores democráticos que caracterizan, impulsan y debemos defender desde Europa con nuestros aliados”. “La legalidad internacional y la paz deben ser más fuertes que el autoritarismo”, ha acentuado.
También, recordando que la pandemia de la Covid19 aún no se ha acabado, Bosquet ha señalado que “aún nos enfrentamos, como cualquier sociedad, a desafíos urgentes que afrontar como el de superar, por fin, una pandemia mundial”. En este punto ha reconocido y agradecido el trabajo de los sanitarios y los profesionales “que lo han dado todo y se han enfrentado en primera línea al virus y que han luchado por salvar cada vida”. “Es justo seguir reconociendo esa vocación y esa entrega impagable, seguir apoyándoles, seguir escuchando sus demandas y seguir mejorando sus condiciones. Se lo merecen más que nadie”, ha apuntado.
En este sentido, ha señalado que “ser presidenta del Parlamento de Andalucía es, sin duda, el mayor honor que he podido ostentar en mi vida. Un orgullo y una responsabilidad inmensos”. “Este Parlamento es el punto de encuentro de la sociedad andaluza y de sus ideas. El lugar donde confluyen sus diferentes opiniones, proyectos y aspiraciones. Un reflejo de la pluralidad y diversidad de Andalucía. La Casa de la palabra y del debate, que no puede ser confrontación y ofensa, sino argumentación con propuestas”, ha añadido.
Además, también ha tenido palabra dirigidas a todos los representantes públicos en el marco de la tensión política de los últimos tiempos. “Nos corresponde a nosotros no alimentar el hartazgo y el descrédito que aleja a los ciudadanos de sus instituciones. Es necesario que hagamos autocrítica, reconocer nuestros errores y trabajar para enmendarlos. No nos podemos conformar con menos cuando se trata de poner en valor nuestro sistema democrático. Respetemos para hacernos respetar”, ha destacado.
También ha puesto en valor el trabajo realizado en la Cámara autonómica durante esta legislatura “intensa” y “productiva” en la ya se han aprobado veinte leyes y se han renovado todos los órganos de extracción parlamentaria, “tal como establecen las normas que nosotros mismos nos hemos dado”. En este punto, ha subrayado los esfuerzos realizados en acercar la institución al ciudadano “con más de 100 actividades celebradas en el seno de la Cámara” y numerosas acciones para que los ciudadanos “se sientan partícipes de esta institución y este Parlamento también participe en sus reivindicaciones y celebraciones”.
Marta Bosquet ha destacado el trabajo realizado en transparencia y, especialmente, en accesibilidad e inclusión. “Y un avance con el que me siento especialmente implicada: el de la accesibilidad e inclusión”. “Un compromiso que ha sido otra prioridad en esta legislatura y que se ha materializado en mejoras puestas en marcha de la mano de las asociaciones del sector de la discapacidad. También un impulso a nivel laboral, ampliando la oferta de empleo público, no solamente para personas con discapacidad física e intelectual, sino también para personas con trastornos del espectro autista, una medida pionera en el ámbito de la administración pública”.
En otro orden de asuntos, el discurso de la presidenta de la Cámara legislativa de Andalucía también ha puesto énfasis en algunos de los problemas más urgentes de la comunidad como es “la lucha contra la discriminación y el compromiso con la igualdad”. “Mientras exista discriminación y brecha salarial; mientras haya techos de cristal que impidan a las mujeres desarrollar todo su potencial; mientras sufran acoso y maltrato y, sobre todo, mientras una sola mujer siga siendo asesinada por violencia machista, no podemos descansar”, ha dicho con rotundidad.
Sobre los problemas del campo andaluz, la presidenta ha pedido “no fallarles porque Andalucía no se puede entender sin la fuerza de su campo”. “Lo que estos años atrás ya era una situación alarmante se ha convertido, directamente, en insostenible, debido al encarecimiento de los costes de producción, la falta de control en fronteras ante la competencia desleal de terceros países, la necesidad de acometer infraestructuras hidráulicas, la reforma y recortes de la nueva PAC y ahora, además, sumamos la terrible sequía”. “Nuestros agricultores y ganadores luchan por la supervivencia de sus explotaciones y por nuestro futuro, porque sin vida en el campo no hay trabajo en los pueblos ni alimentos en las ciudades”. También ha puesto énfasis en los problemas de los pescadores, “que cada día se enfrentan a más restricciones y dificultades para poder salir a faenar, lo que pone en peligro una actividad con tanta tradición en nuestra comunidad”.
Por otro lado, Marta Bosquet ha reclamado una financiación “justa” para Andalucía. “Es urgente actualizar el sistema, reconocer el peso poblacional de Andalucía y hacer efectivo el principio de igualdad. Garantizar, en suma, un reparto equitativo, sin favorecer a unas regiones frente a otras por criterios políticos o intereses partidistas, lo que fractura la cohesión social de nuestro país”. En esta línea, también ha apelado a la “unidad” para buscar soluciones “ante problemas apremiantes, como el de la subida de los precios de la energía con un coste de la luz disparado y los combustibles alcanzando máximos”.
En relación al avance de Andalucía en los últimos años, la presidenta del Parlamento ha afirmado que “nuestra Comunidad Autónoma ha presentado, pese a la Covid, datos muy esperanzadores, alcanzando cifras realmente positivas en inversión, exportación, creación de empleo, de empresas y de autónomos”. “Andalucía es una tierra repleta de talento y capacidad y está demostrando que realmente puede ser motor de progreso en España y liderar la recuperación”, ha destacado.
Marta Bosquet ha finalizado su discurso volviendo a poner en valor la democracia como “el triunfo del entendimiento y la convivencia. El único sistema que concilia el respeto a la diversidad, a la dignidad de los ciudadanos y el imperio de la ley”. La mejor forma de evitar que algo tan valioso se erosione por la desafección, la intolerancia o el sectarismo es afianzando nuestro consenso constitucional porque la Constitución del 78, ese gran acuerdo de convivencia y diálogo, es el marco democrático que ha propiciado el periodo de mayor prosperidad de nuestra historia y el estado de las autonomías”, ha enfatizado.
La presidenta del Parlamento ha concluido intervención subrayando que “Andalucía es una tierra que mira al futuro con ilusión y esperanza desde la fuerza de nuestra identidad”. “Estamos llamados a continuar ese sueño compartido que nos une. A mantener viva esa aspiración de progreso y bienestar y a seguir impulsando el avance de Andalucía por sí, para España y la Humanidad”.
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