La Real Academia de Ciencias ha entregado este miércoles la Medalla Echegaray al químico e investigador Luis Oro Giral, catedrático emérito de Química Inorgánica en la Universidad de Zaragoza. Este galardón científico es el más antiguo que se concede en España y se otorga cada dos años a un investigador que tenga una trayectoria sobresaliente.
Luis Oro (Zaragoza, 1945) recibe este galardón en reconocimiento a sus aportaciones científicas de primer nivel a la comunidad internacional en el campo de la química inorgánica molecular y organometálica en particular, así como su contribución al desarrollo de la ciencia en España, "tanto desde los resultados de su grupo de investigación como desde su gestión en puestos de gran responsabilidad en el sistema de ciencia y tecnología de nuestro país".
Para Oro Giral, especializado en Química Organometálica y Catálisis Homogénea, la química organometálica "puede ser la disciplina fundamental para sentar las bases de un desarrollo sostenible de nuestro planeta, ya que es un área muy cercana a la química verde".
El investigador ha recogido el premio de manos de Ana Crespo, presidenta de la Academia, en un acto solemne donde ha estado acompañado por la vicerrectora de Política Científica de la Universidad de Zaragoza, Pilar Pina.

En su discurso, el profesor Oro ha repasado en su discurso la política científica desarrollada en España desde los tiempos de Cajal hasta los centros de excelencia actuales: "Para quienes, como yo, iniciamos nuestra trayectoria investigadora en química moderna formándonos en el extranjero y regresamos con ilusión a unos laboratorios con recursos escasos, esta evolución es muy gratificante."
Después ha recorrido su trayectoria científica y la de su grupo dentro del Instituto de Síntesis Química y Catálisis Homogénea, ISQCH (centro mixto CSIC-Unizar): "Hemos procurado avanzar en las fronteras del conocimiento, formando químicos creativos y abordando cuestiones demasiado básicas o arriesgadas para la industria, pero con capacidad para generar conocimiento útil y transformador."
Desde su creación en 1905 han recibido el galardón 18 personas, entre las que destacan el Nobel de Física de 1902 Hendrik Lorentz en 1925, Margarita Salas en 2016 y Mariano Barbacid en 2018, entre otros. El último galardón fue otorgado al matemático granadino José Carillo de la Plata en 2022.
"Me siento muy agradecido por esta generosa distinción, y abrumado al comprobar la excepcional relevancia de científicos que me han precedido, entre ellos cinco premios Nobel, dos de ellos — Svante Arrhenius y Ernest Rutherford— galardonados con el Nobel de Química." ha comentado Oro en su discurso.
Luis Oro es doctor en Ciencias Químicas, catedrático emérito de Química Inorgánica en la Universidad de Zaragoza. Su actividad investigadora se ha desarrollado en el área de Química Organometálica y Catálisis Homogénea, dentro del Instituto de Síntesis Química y Catálisis Homogénea, ISQCH (centro mixto CSIC-Unizar) y ligado con una obra científica sobresaliente de gran impacto, que le ha convertido en un referente internacional. En cuanto a gestión de la investigación tuvo gran influencia en el desarrollo del sistema español de ciencia y tecnología.
Es miembro de varias academias científicas, entre ellas la Academias Nacionales de Ciencias de Alemania y Francia. Entre las numerosas distinciones que ha recibido se cuentan el Premio Lord Lewis de la Royal Society of Chemistry, el Premio Nacional de Investigación Enrique Moles en ciencia y tecnología químicas, el Premio a la investigación y medalla de oro de la Real Sociedad Española de Química, la medalla Sacconi, el Premio de la European Chemical Society, el Premio Rey Jaime I a la investigación y el Premio Humboldt.
Sobre la RAC
La Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de España, desde sus Estatutos fundacionales aprobados por la Real Orden de 25 de febrero de 1847, tiene la tarea de fomentar el estudio y la investigación de las Ciencias Matemáticas, Físicas, Químicas, Geológicas y Biológicas, y de sus aplicaciones, así como de propagar su conocimiento. Entre sus principales funciones destaca la de asesoramiento al Gobierno en temas de su competencia, singularmente en los de política científica que puedan tener trascendencia en el desarrollo científico y tecnológico del país.