La Policía Nacional ha desarticulado una organización criminal que empleaba el transporte público para distribuir hachís a los puntos de venta. Utilizaba a jóvenes como "correo" de la sustancia estupefaciente viajando en el suburbano madrileño o en patinete eléctrico a los lugares donde se llevaba a cabo la comercialización de la droga. Allí hacían la entrega del paquete haciendo el mismo viaje de retorno con la suma de dinero que había recibido. El líder de la organización adoptaba diferentes medidas de seguridad ante los investigadores policiales y otros grupos rivales llegando a emplear un dispositivo de inhibición de las frecuencias para evitar ser detectado.
Un año de investigación
La investigación se inició en junio del pasado año cuando los agentes tuvieron conocimiento del posible traslado a través de la red de transporte público de Madrid de sustancia estupefaciente. En ocasiones cuando estos viajes se hacían a lugares más alejados donde no llegaba el suburbano utilizaban patinete eléctrico o transporte colectivo de viajeros.

El lunes 9 de junio se llevó a cabo la entrada y registro en cuatro domicilios ubicados en Alcobendas, San Sebastián de los Reyes y Talamanca del Jarama donde se pudo incautar aproximadamente un kilogramo de hachís, un inhibidor de frecuencias, 3 básculas de precisión, útiles para el montaje de una plantación indoor de marihuana además de inscripciones para marcar placas de hachís.
Dos mujeres y seis varones fueron detenidos como presuntos autores de los delitos de tráfico de estupefacientes, pertenencia a organización criminal y blanqueo de capitales.