En el corazón de Andalucía, entre sierras, olivares y aldeas blancas, se encuentra Benamejí. No es solo un rincón pintoresco del interior cordobés, es el lugar donde el agua cobra vida, y donde miles de personas llegan cada verano buscando algo más que una actividad: una experiencia.
El rafting en el río Genil se ha convertido en uno de los planes más atractivos del verano andaluz, y Benamejí es hoy el epicentro de esta corriente de turismo activo, sostenible y con alma. ¿El responsable? Saltaríos Turismo Activo, la empresa pionera en esta modalidad en Andalucía.
"El río es el amor de nuestra vida. Y compartirlo cada día con personas de todos los rincones del mundo… es un verdadero regalo", afirma Iñaki Arrate, fundador de Saltaríos, quien hace casi tres décadas apostó por esta tierra y sus aguas como lugar de aventura y encuentro.
De visión a destino
Lo que comenzó como una propuesta casi visionaria entre Benamejí y Palenciana, es hoy uno de los referentes del turismo de aventura del sur de Europa. Cada verano, miles de personas se lanzan a las aguas del Genil, confiando en la experiencia y seguridad de un equipo que conoce cada curva del río y cada historia que se ha vivido en él.

"Hace casi 30 años fuimos los primeros en ver el potencial de estas aguas mágicas. Hoy, mirar atrás y ver lo que hemos construido nos llena de orgullo: un destino reconocido, vibrante, lleno de vida… y con miles de aventureros que cada verano se lanzan a vivir esta experiencia", señala Arrate.
Desde familias con niños que prueban por primera vez el rafting, hasta grupos de amigos, empresas o despedidas de soltero/a, Saltaríos ofrece actividades adaptadas para todos, con materiales de primera calidad, guías titulados y un enfoque profundamente humano.
Turismo activo, emoción y naturaleza
Benamejí no solo ofrece aguas bravas. Ofrece desconexión, reencuentros, gastronomía local y una acogida sincera. Hacer rafting aquí es también detenerse a comer en una aldea con encanto, explorar senderos, conocer leyendas del río o simplemente dejarse llevar por el silencio del agua entre amigos.
Desde mayo hasta octubre, con un caudal óptimo y condiciones seguras, el Genil permite disfrutar de recorridos de distintos niveles. Entre ellos destacan el Tramo Aventura, para mayores de 12 años, y el Tramo Familiar, ideal para niños desde 7 años.
"Cada verano recibimos a miles de personas que se suman a nuestra familia de aventureros. Gente que repite, que se convierte en embajadora de esta tierra y de este río. Personas que ya forman parte de esta gran familia aventurera", concluye Iñaki con una sonrisa que resume lo vivido en cada temporada.
¿Por qué Benamejí?
Porque es accesible, está cerca de todo —a una hora de Málaga o Córdoba—, y combina el alma rural de la Subbética con la emoción del turismo activo. Porque aquí el rafting no es solo deporte: es una forma de viajar, de sentir y de vivir el verano.
Y porque en un mundo que va deprisa, hay pocas cosas tan necesarias como parar… y dejar que el río haga lo suyo.