El concejal de Cultura del Ayuntamiento de Fuengirola, Rodrigo Romero, ha ofrecido esta mañana una rueda de prensa para informar de un nuevo espectáculo en el Palacio de la Paz. En esta ocasión se trata de Zarzuela, que regresa a Fuengirola de la mano de la compañía Teatro Lírico Andaluz que representará la obra “La Leyenda del Beso”, el sábado 10 de febrero a las 20:30 horas. Las entradas tendrán un precio de 10€ en platea o 15 € en los palcos y se pueden adquirir en la Casa de la Cultura o en el Palacio de la Paz desde dos horas antes del comienzo de la función.
“Para nosotros es una tarea que nos hemos autoimpuesto, y además es un auténtico placer, que no se pierda la tradición del teatro lírico y de nuestra Zarzuela y que sigamos teniendo estas grandes obras en Fuengirola al menos un par de veces al año”, ha explicado Romero, destacando que “una vez más será la compañía de Teatro Lírico Andaluz quien nos traerá en esta ocasión La Leyenda del Beso, una zarzuela en dos actos dividida en tres cuadros que tiene un elevado nivel musical, con una complejidad que la hace muy parecida a lo que podríamos considerar una ópera”.
“La Leyenda del Beso tiene temas musicales muy famosos, el más conocido es el que popularizó Mocedades con Amor de hombre”, ha indicado Romero, señalando que “es una auténtica preciosidad de Zarzuela que tiene su puntito de comedia y su puntito de drama y de lo que se trata es de disfrutar de un género tan español como la zarzuela”.
La leyenda del beso es una zarzuela con libreto de Enrique Reoyo, José Silva Aramburu y Antonio Paso, y música de los maestros Reveriano Soutullo y Juan Vert. Se estrenó con gran éxito en el Teatro Apolo de Madrid, el viernes, 18 de enero de 1924. La acción se sitúa en el parque de un viejo castillo señorial, donde Mario y sus amigos celebran su despedida de soltero, debido a su boda con una señorita impuesta por su familia. A ella acuden todos sus amigos y amigas, destaca entre ellos Gorón, un calavera simpático y fresco, dispuesto a todo; en concreto, a seducir a la hija del guardia del castillo, Simeona, sin preocuparse mucho de Cristóbal, el novio de esta, un bruto gañán. Juan, el guardia, interrumpe la fiesta avisando de la llegada de unos gitanos que piden permiso para acampar en las tierras del castillo, los hacen pasar y se presentan ante Mario y sus amigos.