La Diputación de Granada ha solicitado al Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico del Gobierno de España una subvención para poner en marcha una Oficina de Transformación Comunitaria que promueva y acompañe de manera activa la creación de comunidades energéticas locales en la provincia provincia, con el objetivo de asesorar a la ciudadanía y pymes locales en materia de ahorro de costes energéticos y producción de de su propia energía.
El proyecto, financiado con fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, ascenderá a un total de 728.850 euros, de los cuales 560.000 (76,80%) corresponderá a la subvención que se solicita al Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), mientras que la Diputación de Granada realizará una aportación de 168.850 (23,2%). El periodo de actuación de esta oficina será desde el 1 de octubre de 2023 al 30 de septiembre de 2025.
La diputada de Empleo y Desarrollo Sostenible, Ana Muñoz, ha indicado que entre las actividades que plantea esta oficina está el asesoramiento y acompañamiento para la creación de comunidades energéticas, la difusión de este nuevo modelo de cooperación, y formación al respecto. "Pretendemos que varias empresas locales y ciudadanos puedan colaborar en la producción de energía renovables, conseguir ahorro energéticos en sus instalaciones, y promover acciones de mejora y ahorro de sus consumos energéticos", ha explicado, y ha puesto como ejemplo la compra de un vehículo eléctrico comunitario que esté a disposición de los asociados, la instalación de placas solares en edificios con cubierta de la que puedan beneficiarse otras personas sin azotea o la compra conjunta de equipamientos de ahorro a un precio más barato.
La diputada ha recordado que este proyecto llega después de dos experiencias piloto realizadas en los años 2021 y 2022 en varios municipios de la provincia. "Hoy sabemos que hay interés ciudadano como para plantarse iniciar las primeras experiencias y se dan las condiciones técnicas inicialmente necesarias", ha subrayado. No obstante, ha precisado que hay barreras para poner en marcha los proyectos que tienen que ver con la falta de recursos económicos y humanos para ejecutarlos. "Es ahí donde quiere incidir esta nueva oficina, dando un soporte que actualmente es inexistente, para que las comunidades energéticas locales se conviertan en una alternativa real".
Muñoz ha insistido en que los ayuntamientos, por su escala y cercanía al ciudadano son "un actor e instrumento imprescindible para la transición energética renovable, sostenible, descentralizada y democrática", y que se trata de aprovechar la capacidad de actuación de las entidades locales (en suelo, planificación urbana y ordenación del territorio, edificación, movilidad, etc.).
"La transición energética representa una gran oportunidad, de crecimiento, y puede ser un motor de generación de empleo, de innovación y ayudar a la implantación de un tejido industrial de alto valor añadido", ha sostenido, afirmando que la Diputación está acompañando a los municipios en todo este proceso.
Entre otras actuaciones, la institución interviene en la redacción de auditorías energéticas, planes de optimización energética, planes de sostenibilidad energética o planes de movilidad urbana sostenible; también en la formación, participación y sensibilización para la transición energética; y en la búsqueda de financiación para implementar medidas que favorezcan la transición energética.