La Guardia Civil y el Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria han puesto a disposición judicial a once personas, de entre veinte y cincuenta y siete años de edad, por ser los presuntos autores de delitos contra la salud pública por cultivo y elaboración de drogas y de delitos de defraudación eléctrica, como resultado de los registros llevados a cabo en viviendas de la localidad de Alhendín (Granada).
El área de investigación de la Compañía de Armilla, tras ser requerida por parte de la compañía eléctrica Endesa dadas las numerosas incidencias por cortes de luz y sobrecargas de tensión en el tendido eléctrico en uno de los barrios del municipio alhendinense, dio inicio a la operación Ermita-Barranco con una exhaustiva investigación para detectar los posibles enganches ilegales a la red eléctrica, así como la potencial existencia de cultivos interiores de cannabis, frecuentemente vinculados a la existencia de dicha clase de enganches y que no solo ocasiona molestias a los usuarios, sino que pone en peligro las instalaciones y los edificios con el consiguiente riesgo para las personas.
Para el registro y verificación de la zona, se activó un amplio operativo policial donde la Guardia Civil trabajó coordinadamente con el Servicio de Vigilancia Aduanera, y contó con el apoyo y la protección de la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Comandancia, el Servicio Cinológico y también con el equipo Pegaso para la vigilancia del espacio aéreo, todo ello además de la colaboración de los técnicos de la compañía eléctrica para la detección de los enganches de luz fraudulentos y descubrir el trazado del cableado para los mismos.

Un importante despliegue de medios humanos y técnicos, con un balance de 31 verificaciones de luz llevadas a cabo y, como resultado, la localización de una vivienda con cultivo de marihuana y 10 viviendas con enganches ilegales, de las cuales, 4 de ellas, además, sus moradores cultivaban en su interior la misma droga.
Los agentes investigadores realizaron las entradas y registros de las viviendas. Una vez llevadas a cabo, el total de droga aprehendida en el conjunto de viviendas fue de 7132 plantas de marihuana en diversos estados de crecimiento y floración, de las que 5738 eran esquejes. Plantaciones todas ellas conectadas a enganches ilegales al suministro eléctrico.
Como consecuencia de lo acontecido, los guardias civiles pusieron a disposición judicial ante el Juzgado de Guardia de Santa Fe a once personas por su presunta implicación en los hechos: una por delito de cultivo y elaboración de droga, seis personas por delito de defraudación de fluido eléctrico y las cuatro restantes por ambos delitos en su conjunto.