Investigadoras de la Universidad de Granada han liderado un estudio que demuestra cómo la anemia por deficiencia de hierro, la más común a nivel mundial, provoca importantes alteraciones en la salud intestinal. El trabajo, publicado en la prestigiosa revista Biomedical Journal, abre nuevas vías para mejorar el tratamiento de esta enfermedad y reducir sus efectos secundarios.
Los resultados muestran, según la investigadora de la UGR Mª Inmaculada López Aliaga, que la anemia ferropénica tiene un impacto considerable en el microbioma intestinal, el metabolismo colónico y la barrera intestinal. Se observó una alteración en la microbiota del colon en respuesta a la anemia por deficiencia de hierro, con predominio de especies grampositivas como Clostridium, una alta producción de ácidos grasos de cadena media y mayor carga bacteriana. También se encontró un estado general de deterioro del epitelio colónico, con componentes estructurales de la barrera intestinal afectados por la deficiencia de hierro, como genes y proteínas asociados a la matriz extracelular, como el colágeno.
Como consecuencia del deterioro de la barrera intestinal se observó un aumento de la translocación de bacterias y de la respuesta inmunitaria del huésped frente a ellas.

Como señala la doctora Soriano Lerma, autora principal del trabajo, el análisis de estas características de la salud intestinal podría ser importante en el manejo clínico de la anemia por deficiencia de hierro para adoptar enfoques intestinales protectores durante el período de tratamiento de la enfermedad, lo que podría contribuir a minimizar las complicaciones y facilitar su recuperación. La fisiología intestinal debe ser restaurada durante el período de tratamiento e incluso puede conducir a una recuperación más eficiente de la enfermedad.
No obstante, se necesita una investigación más profunda sobre los efectos de los ácidos grasos de cadena corta y su relación con la hipoxia como modulador de la funcionalidad de la barrera intestinal durante la anemia ferropénica. El microbioma intestinal, debido a su capacidad para modular el metabolismo del hierro, junto con una íntegra función de la barrera intestinal, es clave para el mantenimiento de la homeostasis intestinal, y está adquiriendo gran interés como diana a tener en cuenta en la patogénesis de la anemia por deficiencia de hierro.
La investigación, encabezada por la doctora Ana Soriano Lerma y la profesora Mª Inmaculada López Aliaga, del Departamento de Fisiología y el Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos José Mataix de la UGR, ha contado con la colaboración de equipos de la Universidad de Almería, el ibs.GRANADA, dirigidos por Miguel Soriano Rodríguez y José Antonio García Salcedo, y del centro Teagasc Food Research de Irlanda.