El Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha puesto en marcha, a través de su subdirección de Gestión Sanitaria y con la intención de dar un paso más y avanzar en la formación especializada, el curso 'Violencia basada en género, abordajes y buenas prácticas para la atención de mujeres con diversidad funcional en el ámbito sanitario, con especial hincapié en las mujeres sordas'.
Este curso, ofertado a los profesionales de las Comisiones Interdisciplinares de Violencia de Género de los centros sanitarios del sistema sanitario público andaluz, cuenta con dos ediciones con un total de 100 plazas.
La primera edición comienza esta semana y la segunda el 13 de octubre. El curso cuenta con 25 horas de formación que se van desplegando a lo largo de cinco semanas a razón de una sesión semanal por videoconferencia más una serie de horas 'online'.
Esta formación está financiada con los fondos del Pacto de Estado contra la Violencia de Género y en concordancia con las medidas establecidas que buscan implementar un programa formativo especializado en prevención de la violencia de género a profesionales sanitarios y facilitar el acceso a mujeres y niñas con diversidad funcional/discapacidad a material sobre prevención, acoso, agresiones sexuales, etc...
Se impartirán 25 horas de formación especializada para la mejora de la atención de las víctimas de violencia machista con diversidad funcional.
La creación de Comisiones Interdisciplinares de Violencia de Género en las áreas de Gestión Sanitaria, distritos de Atención Primaria y centros hospitalarios surgen como modo de canalizar las intervenciones sociosanitarias que tienen que ver con el cumplimiento de la legislación vigente en materia de violencia de género.
Estas comisiones deben ser órganos de representación, incluidos en el plan de cada centro sanitario, para abordar los problemas relacionados con la detección y la actuación ante los casos de violencia de género y son una excelente vía de participación de los profesionales en la gestión y mejora de la calidad en la atención sanitaria.
Su objetivo será integrar todos los factores organizativos del proceso de atención en casos de maltrato, para que los centros y sus profesionales den una respuesta homogénea y eficaz a las mujeres en esta situación, a sus hijos e hijas y personas dependientes de ellas, de acuerdo con el Protocolo Andaluz para la Actuación Sanitaria ante la Violencia de Género con la finalidad de disminuir la variabilidad en la práctica clínica y reducir las desigualdades detectadas en la atención.
Este protocolo considera a los hijos como víctimas directas de violencia de género. Además, ha incluido un apartado sobre atención a mujeres que viven en el medio rural, mujeres mayores, mujeres con discapacidad, prevención de la mutilación genital femenina en niñas en situación de riesgo y mujeres víctimas de trata. Este hecho va a estar relacionado íntimamente con el perfil profesional del personal que vaya a formar parte de cada comisión.