Un policía nacional en prácticas de la Jefatura Superior de Policía de Aragón detuvo un hombre de 25 años como presunto responsable de un delito de robo con violencia y otro de atentado a agente de la autoridad.
Los hechos ocurrieron en la tarde del pasado sábado en la calle Torres Quevedo, cuando un agente de Policía Nacional fuera de servicio intervino al observar cómo un individuo huía tras robar violentamente un teléfono móvil a una mujer. La víctima, que había sufrido un empujón tras el robo, pidió auxilio en la vía pública, lo que motivó la persecución del presunto autor por parte de varios ciudadanos.
El agente, al percatarse de la situación y tras identificarse verbalmente como policía, trató de interceptar al sospechoso, quien se abalanzó sobre él en un intento de fuga. Tras un forcejeo, el agente logró reducirlo con la colaboración de dos hombres que habían presenciado el suceso.

El detenido, que ya cuenta con antecedentes policiales por hechos similares, pasó el domingo a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia, quedando en libertad con cargos.