La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Huelva ha adjudicado esta mañana las obras para la puesta en valor de los restos arqueológicos de la Plaza de San Pedro. La empresa adjudicataria será la encargada de llevar a cabo unos trabajos de conservación y restauración que incluyen tres zonas expositivas, aunque con especial atención a la situada en la zona norte, pegada a la fachada de la Iglesia.
El primer teniente alcalde de Urbanismo y Medioambiente del Ayuntamiento de Huelva, Felipe Arias, ha señalado que "la apuesta sin precedentes del equipo de Gobierno por la defensa del patrimonio, va a permitir por primera vez en la ciudad de Huelva exponer restos arqueológicos en la vía pública, como reclamo para que onubenses y visitantes sean conscientes de la trascendencia e importancia de nuestra historia". Arias ha adelantado que "se trata de una primera actuación que incluye restauración, protección e iluminación y que continuará con el gran proyecto previsto en el Cabezo de La Joya para la construcción de un parque arqueológico que sirva de referente y guía para mostrar el impresionante patrimonio que tenemos en Huelva bajo los pies".
Con un presupuesto de 230.000 euros, el proyecto redactado por los técnicos municipales, junto con la restauradora Águeda Beatriz Mangas Hernández, incluye trabajos relativos a la consolidación, conservación y restauración de los hallazgos arqueológicos tanto en la zona del Aljibe, como del barrio Andalusí, ambas situadas en el lateral de la plaza donde se ubica el Instituto Andaluz de la Mujer, además del cerramiento para la creación de un espacio expositivo en el lateral de la Iglesia. En concreto, el objetivo principal de la restauración es la conservación de las estructuras existentes en las tres zonas acotadas de la Plaza de San Pedro, que corresponden a las estructuras bajo medievales y andalusíes en la fachada exterior norte de la Iglesia de San Pedro, parcelario barrio andalusí en el sector suroccidental de la Plaza de San Pedro y aljibe renacentista y estructuras romanas en el sector suroriental de la Plaza de San Pedro.

De esta forma, será prioritario respetar los elementos conservadores en su materialidad y sus valores estéticos e históricos, teniendo en cuenta parámetros y factores como la tipología constructiva, las características de los materiales constitutivos y las alteraciones y patologías que presentan.
En cuanto al cubrimiento del lateral de la Iglesia, se propone una solución conservadora con una construcción efímera de vidrio a nivel de suelo, con características similares a cubrición del Aljibe, sin que sobre salga del nivel de pavimento.
En la intervención arqueológica realizada durante las obras de urbanización, ya se dejaron a la vista las estructuras de cerramiento de la Iglesia durante las diferentes etapas históricas, ya que resulta muy interesante a la hora de comprender el conjunto de restos arqueológicos, incluyendo además elementos destacables como una columna romana y algunos arcos mudéjares. Por ello, el espacio expositivo emergerá del pavimento para permitir que la lectura de la fachada de la iglesia pueda verse de manera más completa.
Respetando por lo tanto la nobleza de esa fachada de la Iglesia, la intervención que se propone mantiene y potencia la lectura histórica sobre el edificio, para poner en relación los restos arqueológicos aparecidos y este Bien de Interés Cultural, referente en la ciudad de Huelva. El elemento arquitectónico que sirva de protección a los restos y que permita su correcta visualización, tendrá en cuenta que se encuentra adosado a un BIC con una carga histórica importante en el origen de la ciudad.
El espacio que se ha dejado expuesto tiene una geometría rectangular con una longitud de 10 metros y una anchura de 3,20 metros aproximadamente, contando con una altura variable y profundidad máxima de 3 metros.