Agentes de la Policía Nacional pertenecientes al Grupo de Atención al Ciudadano (G.A.C.), Unidad de Radiopatrullas de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana de Jaén, detuvieron a una mujer de 40 años de edad, de nacionalidad española y con antecedentes previos por hechos de la misma naturaleza, como presunta autora de la comisión de dos robos con violencia con arma blanca cometidos durante la misma tarde del pasado fin de semana. Dos víctimas diferentes en apenas unas horas de diferencia a las que la arrestada no dudó en esgrimir una navaja para conseguir su botín. La primera víctima resultó con heridas leves tras un pequeño forcejeo, la del segundo robo sufrió rotura de parte de su camiseta al repeler la agresión con el arma blanca. La presunta autora huyó del lugar al verse acorralada por los ciudadanos que acudieron a ayudar a las víctimas. La Autoridad Judicial decretó su inmediato ingreso en prisión.
Los hechos ocurrieron durante la tarde del pasado sábado cuando una llamada al Cimacc 091 alertaba a los vehículos en servicio de la comisión de un robo con violencia con arma blanca en un cajero interior de una sucursal bancaria sita en el centro de la capital. A la llegada de los indicativos y entrevistados con la víctima, una mujer de 34 años de edad en actitud muy nerviosa, ésta les manifestó que momentos antes había estado en el cajero automático interior de la sucursal haciendo una transacción y que al darse la vuelta para salir vio como justo detrás suya había una mujer que, esgrimiéndole una navaja le exigió en tono amenazante que le entregara su bolso y ante la negativa de ésta comenzó un forcejeo en el que ambas terminaron en el suelo, momento que aprovechó la arrestada para arrebatarle el bolso proporcionándole un fuerte tirón del mismo.
Los gritos de auxilio de la víctima pusieron en alerta a un ciudadano próximo
Fruto del suceso que acababa de sufrir, la víctima optó por gritar pidiendo ayuda y alertados por los gritos de auxilio fueron varias las personas que se encontraban próximas a la sucursal quienes se acercaron e intentaron retener a la presunta autora del robo, quien al verse acorralada finalmente huyó dejando el bolso en la calle.
Una vez que la víctima relató a los agentes cómo sucedieron los hechos y las características de la persona autora del robo, la denunciante manifestó que se trasladaría al Centro de Salud y que posteriormente denunciaría el robo, éstos comenzaron un amplio dispositivo al objeto de localizar y proceder a la detención de la autora del hecho.
Sobre las 22:00 horas otra llamada alertaba de otro robo con violencia en un establecimiento de alimentación
Aquella tarde a la arrestada se le había torcido el plan, sin embargo no desistió en su objetivo de hacerse con dinero, por lo que aprovechando que se acercaba la hora de cierre de los comercios y que estos ya habrían hecho el recuento de caja se dispuso a entrar en un establecimiento de alimentación de la misma barriada.
Según manifestaciones de la segunda víctima a los agentes que llegaron al lugar, cuando se disponía a cerrar el establecimiento entró una mujer muy nerviosa y sin mediar palabra se abalanzó sobre ella esgrimiéndole un cuchillo, insistiéndole en que le diera la recaudación de la caja. Que como su primera respuesta fue apartarse de esta persona, la presunta autora la agarró de su camiseta y poniéndole la navaja a la altura del pecho le dijo: "DAME EL DINERO DE LA CAJA O TE RAJO Y TE MATO", llegando a causarle un pequeño corte en la camiseta a la víctima.
Un breve espacio de tiempo el que vivió la víctima que se le hizo eterno hasta que pudo zafarse de esta mujer y salir fuera del establecimiento para pedir ayuda, mientras observaba que a toda prisa como ella se dirigía a la caja registradora.
Al escuchar los gritos de auxilio varias empleadas de otros establecimientos se dirigieron al lugar de los hechos, viendo en ese momento como la presunta arrestada cortaba el cable de la caja registradora y la cogía en sus brazos con la clara intención de llevársela, sin embargo, su plan no lo llevó a cabo al verse perseguida por otros trabajadores apenas unos metros en el exterior, que la interceptaron, decidiendo finalmente soltar la caja y emprender la huída.
Los agentes allí presentes, con la máxima premura comenzaron a dar una batida por los alrededores en aras a encontrar a esta persona, a posteriori detenida, ya que reunía las mismas características que el primer robo ocurrido esa misma tarde, localizando a la presunta autora poco tiempo después y procediendo a su detención, no sin antes protagonizar una discutida huída por varias calles de la ciudad en su propósito de evitar ser alcanzada por los agentes.
La detenida una vez fue puesta a disposición de la Autoridad Judicial competente, ésta decretó su inmediato ingreso en prisión.