El "turismo oscuro" consiste en ir a lugares asociados a la muerte, el terror o la tragedia. España se convirtió en uno de los destinos favoritos para los seguidores de estas tendencias. Te contamos cuáles son los tres lugares que no te quieres perder.
La celda de las Emparedadas (León)
En Astorga, entre la capilla de San Esteban y la iglesia de Santa Marta, puede verse una pequeña ventana con una inscripción muy fuerte: "Acuérdate de mi juicio, porque así será también el tuyo. A mí ayer, a ti hoy". Este orificio era el único lugar que tenían, para ver el exterior, las mujeres que se encerraban allí para rezar hasta el día de su muerte, sin salir jamás. También disponían de otra ventana, que las comunicaba con una capilla contigua y les permitía recibir la comida y escuchar misas, todo en completo silencio. Se las consideraba santas al estar libres de cualquier tentación, sin embargo, muchas terminaban enloqueciendo al estar enclaustradas en un espacio tan pequeño (celdas de 2 por 4 metros), con muy poca capacidad de movimiento, durante décadas. La investigadora María Isabel B. Carneiro remarca que, en muchos casos, más que una elección, se trató de un castigo contra mujeres de fuerte personalidad que se negaban a someterse a las reglas de la época: "Esta preferencia bien puede deberse a la imposición masculina de recluir a la mujer en espacios cerrados y limitados, ya pertenezca a la vida religiosa o doméstica". Otro experto añade que las enclaustradas "necesitaban la ayuda de miembros del clero y devotos para llevarles comida y remedios y eliminar sus desechos. Dependían enteramente de la caridad pública. Si la población se olvidaba de ellos, morían". Además de Astorga, hubo emparedadas en Madrid, Roncesvalles, Burgos, Sevilla, Artajona, Jaén y Valencia.
El osario de Wamba (Valladolid)
A pocos kilómetros de la ciudad de Valladolid se encuentra el pueblo de Wamba que tiene uno de los últimos osarios de toda España. Allí se encuentran los restos de más de dos mil personas. los cráneos se colocan en las filas superiores y los huesos largos en los niveles inferiores, para aprovechar el espacio. Visitar el lugar es realmente aterrador, pero atrae una gran cantidad de turistas extranjeros.

Panorámica de Wamba
Belchite, el pueblo de las voces sin cara (Zaragoza)
Se trata de un pueblo que, en agosto de 1937, fue arrasado en una batalla de la Guerra Civil Española donde murieron, según los registros oficiales, 6000 personas. Las ruinas de esta localidad, situada a 20 kilómetros de Fuendetodos, todavía pueden visitarse y, según los expertos en lo paranormal, de noche se escuchan las voces de las personas asesinadas en el lugar. La situación se conoció a nivel nacional e internacional gracias a que, en 1980, un grupo de periodistas del programa radial "IV Dimensión" visitó el lugar y grabó sonidos donde se oyen explosiones, gritos y rugidos de aviones y tanques. Raquel Gracia, una de las guías turísticas, explica que, durante las visitas nocturnas al pueblo, "no se cuenta nada de la historia de la población, simplemente se cuenta un acontecimiento del siglo XVIII y ya luego se trata el tema de psicofonías, de imágenes que se han visto, de fotografías que se han hecho, de sucesos que le ocurrió a la población a lo largo del tiempo. Hay un momento, dentro de la iglesia de San Martín de Tours, en el que dejamos que los visitantes se queden a solas y a oscuras en la capilla, un lugar donde muchos han asegurado sentir algo".