Un nuevo método desarrollado en la Universidad de Granada permite anticipar el declive muscular en personas mayores a partir de un gesto cotidiano y sencillo: sentarse y levantarse de una silla. Un equipo de investigadores de la UGR ha diseñado un método innovador para evaluar el rendimiento neuromuscular en personas mayores de 60 años y para detectar de forma temprana el deterioro muscular y funcional en personas mayores, una población especialmente vulnerable a la pérdida de funcionalidad y lesiones graves asociadas a las caídas. El equipo, liderado por Daniel Jiménez Lupión y formado por investigadores del grupo de investigación IDAFISAD-642 y del laboratorio Strength and Conditioning de la Facultad de Ciencias del Deporte, ha combinado el trabajo con un dinamómetro electromecánico funcional, una herramienta que mide la fuerza aplicada durante el movimiento, y el test de sentarse y levantarse con carga. Esta combinación proporciona una forma sencilla y objetiva de medir cómo varía la potencia muscular al envejecer.
En el estudio, publicado en la revista Experimental Gerontology, han participado 113 voluntarios divididos en dos grupos: 49 adultos de mediana edad (entre 40 y 59 años) y 64 adultos mayores de 60 años. Durante la prueba, cada participante realizó cinco repeticiones de sentarse y levantarse de una silla bajo cinco cargas incrementales, mientras el dispositivo registraba en tiempo real la fuerza, la velocidad y la potencia de empuje del tren inferior. De estos datos se extrajeron tres parámetros clave que describen la máxima fuerza teórica, la máxima velocidad teórica y la potencia muscular general.

Los resultados revelaron que los adultos mayores presentaban valores significativamente inferiores en todos los indicadores de la relación carga–velocidad respecto al grupo de mediana edad, confirmando el declive de la función muscular con el paso de los años. Además, estos parámetros mostraron una alta correlación con otras pruebas de rendimiento muscular y calidad de vida, lo que refuerza su validez como marcador de salud musculoesquelética.
A diferencia de las técnicas tradicionales que miden esfuerzos máximos en un solo movimiento, este protocolo emplea un gesto natural y cotidiano —sentarse y levantarse— y permite evaluar la calidad muscular de manera rápida y sin excesiva fatiga, lo que lo hace especialmente apropiado para personas mayores y para entornos clínicos o comunitarios donde la agilidad y la seguridad son prioritarias.
Este trabajo forma parte de la tesis doctoral de Daniel Jiménez Lupión en el programa de Biomedicina de la UGR, cuyo objetivo es identificar un nuevo método para evaluar la calidad muscular y el riesgo de caídas en personas mayores. La tesis está dirigida por los doctores Luis Javier Chirosa Ríos y Daniel Jerez-Mayorga. Estos avances abren nuevas vías para integrar tecnología y ejercicio en la lucha contra el envejecimiento funcional, con el fin último de promover un envejecimiento activo y autónomo.