Desde el pasado lunes se están desarrollando los tradicionales Rosarios de Azulejos que, partiendo desde la parroquia, visitan los monumentos dedicados a la Virgen de Montemayor en distintos emplazamientos de la localidad. La nueva directiva de la Matriz moguereña que preside Sergio Gamón ha querido impulsar estos rosarios previos a la romería que este año están registrando una masiva afluencia de fieles, que acompañan masivamente al estandarte con la imagen de la Patrona en su recorrido. A la llegada a cada uno de los azulejos se canta, se baila y se reza a la Virgen en un ambiente festivo que anticipa la gran fiesta romera del fin de semana.
Como es tradición, los niños y niñas son destacados protagonistas en estos recorridos marianos que concluyen hoy miércoles con la llegada de la comitiva a la casa de los Mayordomos de la Romería 2025, los hermanos Inés María y Rafael Bogado, que recibirán en custodia el Simpecado de la Hermandad y ofrecerán a su pueblo una copa de bienvenida.
Punta Umbría llega mañana en barcas a la romería
La programación previa a la Romería de Montemayor continúa mañana jueves con la singular estampa que nos depara la llegada en barcas al antiguo puerto de Moguer de la hermandad filial de Punta Umbría.

Los romeros marineros realizan un gran esfuerzo para mantener esta hermosa tradición que pone en valor los estrechos lazos que las dos localidades mantuvieron siempre a través del rio Tinto, no en vano, muchos moguereños relacionados con la pesca y la navegación se trasladaron a Punta Umbría cuando la actividad marinera local entró en declive debido a la pérdida de calado del rio. Estos moguereños se llevaron consigo la devoción a la Virgen de Montemayor que con el paso de los años ha ido calando entre la población puntaumbrieña, siendo la filial marinera una de las más activas y comprometidas de cuantas acuden a la romería.
Para poder arribar al antiguo muelle de la Ribera, los peregrinos de Punta han de pasar con sus barcas bajo la tubería de agua que atraviesa el cauce del río, un paso que sólo se puede hacer con marea baja, lo que condiciona cada año el momento de la llegada al puerto de los romeros.

Este año la llegada está prevista a las 14 h., momento en el que cientos de moguereños se acercarán a la Ribera para recibir con alegría a la filial marinera y agradecer con su presencia y su cariño el esfuerzo que realiza por mantener viva esta tradición.
Preparación del recinto romero de Montemayor
Como cada año el Ayuntamiento de Moguer lleva trabajando varias semanas en el acondicionamiento de todo el recinto romero, una labor especialmente complicada este año dado el mal estado de los caminos debido a las fuertes lluvias de las últimas semanas.
Desde los accesos al coto de Montemayor, a la habilitación de las zonas de aparcamientos, pasando por la limpieza y adecentamiento de la ermita de la Patrona, la instalación de servicios públicos, las infraestructuras eléctricas y de abastecimiento de agua, los dispositivos de seguridad, evacuación y control de incendios, el apoyo logístico a las hermandades filiales, o el refuerzo del servicio de limpieza, el consistorio local ha vuelto a prestar toda la colaboración posible a la Matriz de Montemayor para que todo el esfuerzo que ésta realiza junto a sus filiales y a los mayordomos de la romería, se traduzca en una brillante celebración de la que puedan disfrutar con normalidad todos los fieles y devotos de Montemayor.
En relación con el peligro de incendio, y pese a la previsible humedad del ambiente, todos los chozos montados en el recinto romero disponen de extintores, permaneciendo también activo durante toda la fiesta un dispositivo especial contraincendios a cargo del consorcio provincial de bomberos.
Como cada año la romería de Montemayor tendrá centralizados en la casa del Coto los servicios de mantenimiento e información, así como el de atención médica, habiéndose habilitado un helipuerto en una zona próxima para el rápido traslado de posibles accidentados, reforzándose además la dotación de personal del centro local de salud de Moguer para poder atender cualquier imprevisto.