La Policía Nacional quiere alertar y ofrecer consejos de seguridad respecto de algunas de las estafas que tienen lugar en el ámbito tecnológico, y que han visto un aumento en los últimos tiempos.
Estafa "hijo en apuros"
La proliferación de denuncias perpetradas con este modus operandi consiste en que los ciberdelincuentes, a través de conversaciones en aplicaciones de mensajería instantánea, se dirigen al destinatario de la estafa (padre/madre) en términos como: "mamá/papá, éste es mi nuevo número de móvil", simulando ser los hijos (u otros familiares o amigos) de las víctimas, convenciéndoles de encontrarse en una situación delicada y solicitándole con urgencia diversas cantidades de dinero a través, generalmente, de transferencias bancarias.

Víctimas de esta estafa: Personas mayores.
En este tipo de delitos, los usuarios menos familiarizados con las nuevas tecnologías pueden ser un blanco fácil. Es de significar que el colectivo que está siendo víctima de este tipo de engaños en mayor medida son las personas mayores, que no son expertos en las nuevas tecnologías, y tras ser contactados por una persona que dice ser su hijo, afirmando que se encuentra en problemas, sufren el llamado "efecto túnel" y no se percatan de que están siendo víctimas de una estafa.
Prevención
Para evitar este tipo de estafa la prevención se presenta como el arma más eficaz, y debemos tener en cuenta los siguientes consejos:
- Desconfiar cuando se trate de solicitudes de dinero o aportación de datos personales o bancarios
- Desconfiar si el supuesto familiar tiene excesiva prisa por realizar las operaciones
- Darnos tiempo para hacer las comprobaciones necesarias, y a ser posible de viva voz con personas de nuestra plena confianza
- Nunca enviar fotos de nuestra documentación personal
Estafas con "inversión" en Criptomonedas
Estas estafas están protagonizadas por plataformas y/o empresas fraudulentas y no autorizadas que, bien de forma presencial, telefónica o, principalmente a través de internet, ofrecen sus servicios como asesores o "brokers" a la víctima para que ésta, mediante engaño, lleve a cabo importantes inversiones económicas que no recupera. Cabe destacar que en este tipo de estafas el principal "señuelo" es la inversión en criptoactivos.
Una vez consiguen una primera disposición económica por parte de la víctima, le hacen llegar información sobre su supuesta inversión, convenciéndole de que le está suponiendo importantes beneficios, siendo todo ello totalmente falso. Tras realizar varias transferencias, la víctima pregunta a los supuestos "asesores" la forma de recuperar todo o parte de los beneficios. En ese instante es cuando comienzan a surgir determinados problemas, argumentando los responsables de la estafa que para que la víctima pueda disponer de ese dinero tiene que hacer frente a unos pagos previos en concepto de comisiones o impuestos. Todo se trata de una trama perfectamente planificada para que la víctima realice más transferencias, hasta que en un momento dado, los supuestos "asesores" dejan de comunicarse con las víctimas.