A las 04:20 horas de la madrugada del pasado día 21, se recibe una llamada en la Sala CIMACC 091 de la Jefatura Superior de Policía de Melilla procedente del Servicio de Urgencias del
Hospital Universitario alertando del ingreso de un varón aquejado de un intenso dolor abdominal, a quien se le practicaron radiografías que evidenciaron la presencia de multitud de envoltorios en forma de bellota en sus intestinos, pero que dos de ellas se habían alojado en el interior de una hernia inguinal que padecía el paciente, obstruyendo el paso de todas las demás, confirmando el propio paciente que se trataba de hachís.